En este momento, es casi un rito de iniciación para los residentes de la ciudad de Nueva York viajar al norte del estado, al valle del Hudson, con la intención de comprar muebles antiguos. Con una gran cantidad de tiendas y ferias artesanales, las ciudades y pueblos de esta zona, cada vez más animados, se han convertido desde hace tiempo en un destino privilegiado para buscar muebles distintivos, desde mesas de comedor y sillas de escritorio hasta textiles y objetos. Pero últimamente, los entendidos en diseño no solo viajan al norte del estado para buscar piezas vintage únicas de coleccionista, sino también para aprovechar el auge de los fabricantes de muebles artesanales a medida que dominan su oficio en la zona. Y Brad Ford ha estado en el centro de todo ello.
Como fundador de FIELD + SUPPLY, el diseñador de interiores Ford supervisa una gran cantidad de oportunidades para buscar y adquirir muebles personalizados en sus ferias bianuales. Este evento de varios días, que se celebra en Hutton Brickyards, en Kingston, se autodenomina una interpretación moderna de un bazar de diseño y es un auténtico quién es quién de los fabricantes de muebles de todo el valle del Hudson. Este año, este animado mercado celebra su décimo aniversario, lo que lo convierte en una temporada especialmente emocionante para visitarlo.
«La primera vez que lo hicimos, lo organicé en unos tres meses, con cerca de 24 vendedores», dice Ford. «Ahora, probablemente tengamos cerca de 300 y entre ocho y diez mil visitantes». Me gusta pensar que es algo que la gente espera con ilusión en este momento, porque lo celebramos en la misma época todos los años. Y me encanta que se valore a todos los diferentes artesanos que viven en la comunidad y se les rinda homenaje».
El diseñador de interiores Brad Ford, fundador de FIELD + SUPPLY.
Con entre un 30 y un 40 % de esos vendedores dedicados al sector del mueble, es casi seguro que encontrarás al menos un fabricante que se ajuste a tu propio gusto estético. El mercado exhibe de todo, desde las piezas sin residuos de FN Furniture en Kingston hasta las elegantes mesas y armarios hechos a medida de Michael Robbins en Germantown. Por supuesto, la feria también acoge a muchos otros tipos de fabricantes: algunas de las piezas favoritas de Ford para la próxima sesión de primavera son las tablas de cortar de nogal de KHEM Studios, los espejos tallados a mano de Horton Daniel Furnishings y las cestas tejidas a mano de Cambium Lost Arts.
Si la feria sirve como una especie de centro neurálgico para los muebles de fabricación local, es comprensible que también haya aumentado la visibilidad de muchos de los fabricantes que han participado en ella. «Muchos de ellos pueden haber empezado a fabricar muebles como hobby, pero ahora se han convertido en negocios consolidados. Puede que fuera un taller unipersonal y ahora emplee a varias personas»,afirma Ford.
Sam Moyer, Brian Persico y Jonah Meyer son solo algunos de los artistas que han participado con gran éxito en FIELD + SUPPLY . Estos creadores y sus contemporáneos han formado una comunidad creativa en plena ebullición, con una amplia variedad de estilos que tienden a compartir un espíritu regional distintivo.
Brian Persico estudió diseño industrial en Pratt y comenzó a trabajar con madera tras descubrir que una carrera en el primer campo le llevaría a dedicarse a fabricar «objetos desechables de plástico». Su antigua afición por la fabricación de muebles se convirtió en una nueva carrera con la apertura de Brian Persico Studio, en Windham, Nueva York.
Al igual que muchos movimientos creativos, esta alquimia local de creadores no tiene una fórmula exacta, sino que se entiende mejor como la confluencia de factores, empezando por la simple geografía.
Es fácil comprender lo importante que es la energía y el ritmo de la región para este movimiento emergente de creadores. Hay más espacio para centrarse en el oficio porque hay menos ruido, tanto en sentido literal como figurado. Y , por último, es difícil escribir cualquier historia sobre el valle del Hudson sin mencionar su merecida fama por su belleza natural. Las vistas aquí pueden variar desde las onduladas Catskills hasta los verdes pastos, y encontrar la inspiración creativa puede ser tan fácil como mirar hacia arriba.
Tal es el caso de Moyer, que se mudó a Salt Point en 2011, tras iniciar su negocio de muebles en Los Ángeles. Al más puro estilo del norte del estado, justo antes de nuestra entrevista estaba cortando leña en su patio trasero, mientras admiraba la topografía del bosque que rodea su casa. «Han pasado muchas cosas en este terreno»,afirma. «Estar rodeado de ese legado me hace sentir muy completo, muy realizado».Moyer también se inspira en la leyenda de la carpintería George Nakashima y en los diseños sencillos de los muebles Shaker para sus piezas personalizadas, que van desde mesas de comedor y mesas de centro hasta armarios de 20 cajones.
Artista de FIELD + SUPPLY, Sam Moyer.
Pero quizás lo que más atrae a los clientes hacia Moyer, aparte de las elogiosas críticas en medios como el New York Times, Architectural Digest e Interior Design, es su pasión por crear muebles que resuelven un problema y funcionan como obras de arte.
Brian Persico, cuya empresa Brian Persico Studio tiene su sede a solo una hora al sureste, en Windham, es otro carpintero de la zona que ha triunfado en la fabricación de muebles a medida. Tras estudiar diseño industrial en Pratt, Persico se dio cuenta de que no quería «fabricar objetos desechables de plástico durante el resto de su vida»,por lo que poco a poco convirtió su afición por la fabricación de muebles en su profesión. Inspirándose en diseños vernáculos regionales, como las sillas de poste y travesaño, sus piezas acabadas son una llamativa mezcla de lo tradicional y lo moderno, como un sofá inspirado en sillas con respaldo de escalera combinado con un cojín estampado y tejido a mano y elegantes alfileres de cuerno. Persico también se atreve con prácticamente cualquier tipo de mueble, desde mesas de comedor hasta armarios. «Es una gama muy amplia, lo cual es bueno porque me evita aburrirme»,dice riendo.
Jonah Meyer, propietario y diseñador de Sawkille Co.
Un banco hecho a medida por Sawkille Co. de Jonah Meyer.
Jonah Meyer y su equipo de Sawkille Co., en Rhinebeck, Nueva York, fabrican todo tipo de muebles, desde somieres hasta armarios, en una amplia variedad de estilos, y son conocidos sobre todo por sus atrevidos diseños.
Pero quizá ningún nombre sea más sinónimo de los muebles del valle del Hudson que Jonah Meyer, propietario y diseñador de Sawkille Co. Aunque Meyer y su equipo fabrican mesas, armazones de cama y armarios en una amplia variedad de estilos, la empresa es quizás más conocida por los atrevidos parches de latón que se pueden incrustar en la superficie de las mesas de comedor, con diseños como manos y estandartes. «La tradición del mobiliario estadounidense es muy reducida y muy particular»,afirma Meyer. «Y además nace de la necesidad. La gente quiere piezas sencillas y bien hechas ».Pero cuidado: una visita a la elegante tienda deSawkille Co.en Rhinebeck puede hacerte plantearte la conveniencia de deshacerte de todas tus sillas de comedor en favor de los atractivos modelos de Meyer, fabricados en nogal negro americano. Muchos lo han hecho, incluidos algunos clientes famosos que Meyer es demasiado modesto para nombrar.
En Wildflower Farms, Auberge Collection, situado en el corazón del valle del Hudson, en Gardiner, condado de Ulster, encontrará muchos de los estilos de mobiliario por los que se conoce a la zona. Repartidas por toda la propiedad hay mesas y lámparas procedentes de la tienda de Ron Sharkey Maple Lawn 1843 , en Stone Ridge; taburetes de fieltro y obras de arte en el estudio de fitness y movimiento de la artista textil local Jess Ludwicki, de Love Lamb; sillas antiguas adquiridas en Indiko Antiques en Hudson. El dúo de diseñadores deinteriores Ward + Gray diseñó Wildflower Farms capturando la esencia de la tierra y sus impresionantes paisajes, enfatizando la conexión y creando piezas personalizadas tanto para las zonas comunes como para las habitaciones.
«En nuestra primera visita, fotografiamos el paisaje y luego tuvimos esas fotos en nuestro estudio durante todo el proceso de diseño. Así que el diseño interior se vio muy influenciado por esa paleta de colores y la sensación que transmite el norte del estado de Nueva York», afirma el fundador Staver Gray. La empresa acabó produciendo más de 500 piezas personalizadas para el hotel, entre las que se incluyen alfombras, muebles y tejidos, iluminación y revestimientos para paredes.
Y del mismo modo que el hotel ha reunido a diversos diseñadores para crear un entorno que es a la vez propio del lugar y inimitablemente acogedor, también los creadores del valle del Hudson han formado una comunidad que los ha hecho más fuertes juntos.
Field + Supply se celebra dos veces al año, durante el fin de semana del Memorial Day y a principios de octubre, en Hutton Brickyards, en Kingston, Nueva York, a solo 40 minutos en coche de Wildflower Farms.
En las habitaciones de Wildflower Farms encontrarás tazas de café de L'Impatience Ceramics y alfombras diseñadas por Tailor-Made Textiles, una pequeña empresa y recurso de diseño fundada por mujeres en el norte del estado de Nueva York. En el vestíbulo encontrarás mecedoras Bobbin Rockers adquiridas en una tienda de antigüedades local y retapizadas por Pierre Frey. En Clay, el restaurante insignia del establecimiento, con un menú que destaca la cocina rústica estadounidense, gran parte de la codiciada vajilla procede de Jane Herold Pottery, de Connecticut. Y en la boutique del hotel, The Shop by Gardenheir, la selección de artículos, en constante rotación, incluye desde herramientas de jardinería y artículos para el hogar hasta ropa y una cuidada selección de antigüedades.
